A causa de las prácticas industriales que lleva a cabo esta empresa, se detectaron sustancias como glifosato, endrín, lindano, DDT (entre otros), en ríos, drenes, lagunas y el mar en la costa sinaloense. Estas sustancias, nos cuenta Greenpeace México “se filtran a cuerpos de agua aledaños afectando recursos naturales esenciales como el agua y las comunidades aledañas”. Y agrega: “Bimbo no ha establecido medidas ni periodos de acción para cambiar sus prácticas corporativas y ha evadido su responsabilidad escudándose en la legislación desactualizada y laxa, así como con acciones social y ambientalmente responsables en sus instalaciones, que no responden a su principal actividad: la producción de alimentos”.
La empresa ha sido invitada en varias ocasiones a pasar de una producción industrial que precariza y contamina a una ecológica y ética. No obstante, no se ha recibido respuesta positiva por su parte, y ha mantenido sus prácticas.